En MESH, creemos en celebrar el poder, la elegancia y la determinación de las mujeres que dejan un impacto duradero. Es por eso que estamos entusiasmados de destacar a Carolina Navarro, un nombre que resuena en el mundo del pádel. Conocida por su espíritu incansable y habilidad inigualable, Carolina ha redefinido lo que significa competir al más alto nivel.

En esta entrevista exclusiva, Carolina comparte sus percepciones sobre su notable trayectoria, desde los desafíos que enfrentó hasta las victorias que la moldearon. Con una pasión por el juego y una visión que va más allá del campo, la historia de Carolina es una de perseverancia, crecimiento y un compromiso inquebrantable por inspirar a los demás.

¿Cuándo y cómo comenzó tu trayectoria en el mundo del padel?

Mi trayectoria comenzó cuando tenía 18 años. Empecé a jugar tenis a los 7 años, en Málaga, y, después de varios años de competiciones y entrenamientos, a los 17 años tuve que tomar la decisión de competir profesionalmente o continuar mis estudios. Decidí dejar el tenis para terminar los estudios y asegurar una carrera universitaria para mi futuro. No sabía si en el tenis podría llegar a la cima o si una lesión me alejaría de las pistas, por eso opté por seguir con los estudios.

Fue entonces cuando un amigo de mi hermano me dijo que había un deporte nuevo – el padel. Lo probé y me enganché de inmediato. Como podía compaginar el padel con los estudios, empecé a competir en Málaga con mis hermanas y, muy rápido, di el paso al mundo profesional.

¿Cuál fue el mayor desafío de tu carrera y cómo lograste superarlo? 

Mi mayor desafío fue volver a competir después de dos operaciones del ligamento cruzado anterior. La segunda fue apenas siete meses antes del Mundial de Padel, por eso estaba en "contrarreloj" – fue un verdadero desafío. Me operé el 14 de febrero y gané el Campeonato Mundial de Padel siete meses después. Trabajé 24/7 en la rehabilitación, con el psicólogo, entrenamiento físico y en la pista… Fueron siete meses increíblemente difíciles, pero valieron la pena.

Una curiosidad divertida es que, cuando salió el sorteo, nos tocó jugar contra Icíar y Neki, que eran la pareja número 1 en ese momento y NUNCA les habíamos ganado; llevaban invictas unos 2 años. Por eso, cuando vi el sorteo y me di cuenta de que íbamos a enfrentarlas en las semifinales, fue un golpe duro, pues éramos las parejas nº 1 y 2 del mundo, pero debido a mi lesión, había perdido mi ranking, y los caprichos del destino llevaron a este enfrentamiento… Le dije a mi psicólogo que me estaba recuperando para nada, y él me dijo lo siguiente: “Las cosas pasan por una razón” - y eso fue exactamente lo que pasó. Logramos vencerlas en 3 sets durísimos y luego ganar el Campeonato del Mundo. ¡Fue inolvidable.

¿Quién te inspira en el mundo del padel?

Ahora que vivo el padel de una forma muy diferente a como fue toda mi vida, me inspiran todas esas jugadoras que participan en los torneos, probablemente perdiendo dinero, pero que, aun así, se levantan todos los días para entrenar y perseguir sus sueños, independientemente de las dificultades. Hoy en día, esas jugadoras son mi mayor inspiración.

¿Qué consejos darías a alguien que está empezando en el mundo del padel y piensa en competir? 

Mi experiencia me ha enseñado que es fundamental disfrutar del proceso – de cada día, de cada entrenamiento, de cada competición. Ser disciplinado, entrenar y dar siempre el máximo. Tener fair play, ser un buen compañero y respetar a los adversarios, al árbitro y a tu propio compañero. Y, sobre todo, darlo todo dentro de la cancha – desde el momento en que entras hasta el momento en que sales.

Además, es esencial saber perder… y, aún más importante, saber ganar. Muchas veces, esa es la lección más valiosa de todas.

¿Algún proyecto futuro que puedas compartir con nosotros?

Mi proyecto para el futuro es CAROLINA NAVARRO PÁDEL ACADEMY, mi academia, un espacio que acogerá jugadores de todos los niveles – desde los más profesionales hasta los amateurs, pasando por jóvenes y veteranos.

En CAROLINA NAVARRO PÁDEL ACADEMY, aplicaré mi propia metodología de entrenamiento, un sistema que desarrollé a lo largo de los años basado en mi experiencia y en el conocimiento adquirido con los entrenadores con los que tuve el privilegio de trabajar. Absorbí lo mejor de cada uno de ellos y añadí mi toque personal, creando un enfoque único que creo que es fundamental para el desarrollo de los jugadores.

Por otro lado, seguiré dando voz y creciendo con mi escuela de padel adaptado, PALAS PARA TODOS, para que siga siendo una referencia en el deporte adaptado y para que nuestro mensaje de inclusión llegue lo más lejos posible a través del deporte.

¿Tienes algún ritual/superstición antes de una competición?

Ya tengo pocos rituales o supersticiones dentro de la cancha… El único que aún mantengo es sentarme siempre en el banco más cercano al árbitro.

Si no fueras atleta de padel, ¿qué serías?

Probablemente, sería jugadora de tenis. 

¿Un hobby que no esté relacionado con el deporte?

¡Mi hobby es hacer escape rooms!

¿Joya favorita?

Estoy enamorada de todas vuestras joyas incluso antes de que me invitaran a esta entrevista. Soy muy clásica, por eso, cuanto más simple, mejor. 😊